martes, 19 de abril de 2016

Cuanta vergüenza puede soportar Europa.

El Mediterráneo es Europa. No es una frontera.



Muros, vallas, barcos de guerra, policías, controles, políticas vergonzosas. Todo es inútil para detener una marea humana que huye de la miseria, el hambre y la violencia. Las mafias que trafican con ellos son culpables pero Europa no es inocente, nosotros no somos inocentes y ahora tenemos las manos manchadas de sangre, de sangre derramada por todos y cada una de las personas que han perdido la vida en ese camino de huida hacia la desesperación. 

Nos hemos acostumbrado a escuchar en las noticias que diariamente pierden la vida centenares de personas intentando cruzar ese cementerio, llamado mediterráneo, donde continuamos recogiendo cadáveres con cada marea. ¿Cuánta vergüenza puede soportar Europa? ¿Y los europeos? 

Hace falta más democracia y más redistribución de la riqueza en África pero también en Europa. Si no hay libertad ni oportunidades para las personas la gente se tira al mar, necesitan oportunidades. Hace falta ser muy miope para no entender que Europa debe compartir su riqueza porque ya está bien de tanto defraudador con cuentas en Panamá. 

Durante décadas hemos apoyado y amparado regímenes corruptos para apropiarnos la riqueza natural de África al menor coste posible. Es hora de empezar a pagar nuestras deudas.